Cuando las cosas te van mal tienes la sensación de que la gente huye de ti, de que cortas el punto. Provocas que te ignoren. Se te pierden las cosas, y si pueden salir peor, saldrán peor. Te hacen ver que le ves el lado malo a todo, te pones quisquilloso, irritable e irritante. Te vuelves más duro contigo mismo y no te perdonas ni una. Pretendes ser perfecto en todo lo que haces, sin permitirte el lujo de no preocuparte por las cosas tontas. Discutes con facilidad, y aguantas menos que te lleven la contraria o que no paren de hablarte de cosas que consideras en ese momento poco importantes. Y todo esto ayuda a que las cosas te sigan yendo mal.
En cambio, cuando las cosas te van bien tienes la certeza de que atraes a la gente, de que son felices cerca de ti. Te piden que les hables. Encuentras lo que perdiste, y curiosamente parece que los planetas se alinean para que las cosas te salgan bien. Te comentan lo positivo que eres, te animas a ser amable y agradable con la gente. Buen rollito. Te permites hacer locuras porque sabes que saldrán bien, sin preocuparte de los detalles sin importancia. Eres capaz de coger el coche y lanzarte a la playa a las 3 de la mañana porque sí, y si te mojas los vaqueros te importa bien poco porque luego se secarán, y si no te refrescas. O te los quitas. En esos momentos piensas que para que exista una discusión hacen falta dos personas con ganas de discutir, y toleras que te lleven la contraria. No todo el mundo tiene porqué opinar igual de las cosas. Aguantas al amigo que hoy está insoportable porque es tu amigo después de todo. El karma fluye, el buen rollito se respira y todos están contentos. Y eso ayuda a que las cosas te sigan yendo bien.
Curiosamente, si dejo estos dos párrafos tal cual, la gente podrá pensar que estoy atravesando una buena racha. Si los cambio de orden, la gente seguramente creerá que estoy de bajón.
¿Habrá alguna manera de poder saltar de un párrafo a otro sin sentir que te estás engañando a ti mismo?
5 comentarios:
Yo ya no recuerdo lo que es que me vayan bien las cosas.
Pienso que las cosas no son buenas o malas, blancas o negras. Hay grados de color, en todo lo malo hay cosas buenas y en todo lo bueno hay cosas malas.
Desde hace un tiempo intento ver las cosas buenas. Cuantas más veces repitas que estas mal cada vez vas a ir a peor. Yo hago lo contrario pienso en las cosas que me van bien. Veo el vaso medio lleno.
Beu .:· Ánimo chiquilla :) Lo de que las cosas no van bien quiere decir en realidad que no van tan bien como quisiéramos... Dicen que el truco está en no crearse muchas expectativas con las cosas, y vivir más el presente. Me sería más fácil aplicarme el cuento si no fuera porque me gusta soñar y vivir con ilusiones :/
Natalia .:· Tienes razón pero, ¿no te da a veces la impresión de estar engañándote un poco? Hay veces que puedes, cuando no son cosas muy importantes. Pero otras veces los palos son tan gordos que me siento estúpido si pienso que las cosas van bien...
Yo creo que no me engaño porque aunque tenga problemas pienso que hay cosas peores.
Puedo estar mal pero tengo un techo, tengo comida, tengo trabajo, gente que me quiere y que me apoya... Hay gente que esta mucho peor que yo. Gente que no sabe lo que es abrir un grifo y que salga agua. ¿Cuántos Km tienen que andar para encontrar agua sucia y lejos de ser potable? Yo las necesidades básicas las tengo cubiertas.
Y todo el mundo pasa por malas rachas y el que no que espere.
Hace unas dos semanas una noticia cambió el rumbo de mi vida. Es un problema-cambio-alegría muy inesperada que hará que todo, completamente todo cambie en mi vida y de momento no sé si será para bien(lo espero con toda mi alma) o para mal. Después de conocer la noticia todas mis antiguas obsesiones, problemas o simplemente quebraderos de cabeza se esfumaron. Es cierto, todo puedo complicarse aun cuando ya estaba complicado. Con todo, me he dado cuenta que era una egoísta y una quejica cuando por un contratiempo minúsculo hacía todo un drama.
Un saludo, qvark
Publicar un comentario