domingo, 6 de febrero de 2005

¡quiero más!

Me suelo quedar despierto hasta las tantas. Duermo poco entre semana, normalmente menos de 6 horas. Los fines de semana me acuesto no antes de las 4 y me levanto cerca de la 1 de la tarde. Está todo descontrolado.

Podría acostarme más pronto entre semana, pero no lo aguanto. Ahí está el problema.

la cima
A veces pienso que me quiero acostar tarde porque durante el día trabajo, durante la tarde trabajo, y nunca tengo tiempo para mí, para jugar, para ocio, para charlar con gente, etc. Y así me daban la 1 o las 2 de la mañana. Pensaba que era deprimente tener que acostarse pronto, que el día debería tener más horas para poder disfrutar de la vida... No podía ser posible dedicar todo el día a trabajar, eso no es vida.

Hoy no me vale eso de que hay que querer lo que se hace, y no sólo hacer lo que se quiere. No me lo creo, no vale. Hay mucha gente que hace lo que le gusta y vive de eso. Lo otro es puro conformismo, y en este momento no estoy yo para conformismos.

Hoy es domingo, he venido de trotar un poco por la ciudad, deporte y tal, que de vez en cuando viene bien. Y trotando he pensado que mañana es lunes, que hay que volver al trabajo... ¡que rápido se ha pasado el fin de semana! Y me vino a la cabeza lo de acostarme tarde y porqué esa necesidad tan fuerte, ese casi odio a acostarme a las 11 de la noche. Puede que sea por querer evitar a toda costa que el día acabe... Es como si sintiera que el día vivido no me ha llenado, que debe haber algo más y hay que exprimirlo para encontrarlo, y hay que hacerlo antes de que se acabe el día. Irse a la cama supone pasar página, contar un día más en tu vida y afrontar el siguiente. Una vez que cierras los ojos ya da igual que estés satisfecho con el día o no. Cerrar los ojos al dormir equivale a fichar al salir del trabajo. Ya está hecho. No hay vuelta atrás.

Al quedarme despierto intento que el día no acabe, como si buscase algo más, como si no estuviese conforme con el día vivido. Pero tarde o temprano hay que irse a dormir, es inevitable... y si no lo hago estoy tirando por tierra todo el día siguiente y será aún peor.

¡O pillo un par de días para desconectar o reviento! :@

3 comentarios:

Anónimo dijo...

sabes que Dani,lo mismo me pasa a mi...y es tan fabuloso contar con esas horas de la madrugada para uno mismo...disfrutarse en soledad.....ummmm....QUE RICO....GRACIAS POR TU VISITA...Y ME HA ENCANTADO LO QUE ESCRIBISTE SOBRE LA FELICIDAD....Lunaaaaa

Anónimo dijo...

Voy a darte un poco de envidia... yo tengo fiesta hasta el miércoles!Es verdad que en esta vida de prisas falta tiempo para todo y la noche es momento de recuperar. Pero dormirrr es muy importante!!Por cierto, que sueño tengoo!

Un saludo, Narú

Anónimo dijo...

Yo también salgo tarde de trabajar además tengo el horario partido así que tengo la sensación de que paso casi todo el tiempo trabajando, paso más tiempo con mis compañeros de trabajo que con mis amigos. Creo que estoy empezando a distanciarme de mis amigos de la universidad y eso me entristece. Cada uno esta siguiendo la vida por su lado.
Aunque yo procuro acostarme pronto porque madrugo.
Los fines de semana los provecho al máximo procuro hacer en cada momento lo que me apetece. Tengoo la gran suerte de vivir en casa con mi madre que me hace todo sin ella sería imposible que me quedara tiempo libre y se lo agradezco.
No sé que será de mí cuando me vaya y estoy deseando irme para sentirme un poco más libre: que contradicción tan grande es la vida.